Los seres humanos somos seres sexuados, los cuales expresamos la sexualidad en diferentes etapas de la vida. El desarrollo sexual es un proceso en el que se incluye la evolución psicofísica adecuándose a las diferentes edades. A lo largo de la vida podemos diferenciar cuatro etapas: la infancia, la pubertad y la adolescencia, la juventud y madures y por ultimo la vejez.
INFANCIA
Esta etapa está caracterizada por la curiosidad, la exploración, la observación y el descubrimiento. Los niños/as al jugar y experimentar se les permite desarrollarse y adaptarse a su entorno. Los factores influyentes son:
- El conocimiento de su propio cuerpo y el cuerpo del de otras personas, conductas y comportamientos que les producen satisfacción y bienestar, imitar comportamientos y actitudes de otros niños/as y del entorno que les rodea. intentan encontrar un porqué a todas sus vivencias.
PUBERTAD Y ADOLESCENCIA
Es la transición de la infancia a la edad adulta, comienza a los 10 años y finaliza a los 19 años. En esta etapa comienza el proceso de cambios físicos y hormonales que permiten la transformación del cuerpo infantil a un cuerpo adulto. Estos cambios, hacen que el organismo se prepare para la reproducción y para disfrutar del placer sexual adulto. Los cambios más comunes que suceden en el cuerpo son:
- La aparición del acné y vello púbico, desarrollo de los genitales internos y externos, el ensanchamiento de caderas y maduración de los pechos, comienzo del ciclo menstrual, surgen las primeras eyaculaciones, cambio de voz y ensanchamiento del hombro.
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